Después de la vaga y general presentación de ayer, ha llegado el momento de plantearnos qué queremos hacer exactamente en este blog. El mundo de nuestras Cenicientas es complicado, aunque ya lo hayamos olvidado, y el tema "vestuario" es sólo la punta del iceberg. Todo en nuestras antiguas niñas está cambiando al ritmo de los tiempos, es decir, a velocidad vertiginosa, y si no queremos apearnos o, lo que sería peor, que nos apeen ellas por el camino, hay que ponerse al día...con ciertas normas y límites, por supuesto.
Y es que una cosa tengo clara: el ritmo lo marca la Madrastra, no Cenicienta. Y no hay Hada Madrina ni calabaza que valga; eso sólo existe en esos cuentos de los que ya no quieren ni oir hablar porque son de bebés.
Me diréis que me he vuelto totalmente loca, que estoy diciendo cosas incompatibles: por un lado seguirles el ritmo y por otro marcárselo. Pues no. Es un tira y afloja, complicado por supuesto, en el que nosotras debemos tratar de entender...hasta un punto y ellas entendernos a nosotras...hasta otro. ¿Cómo? Pues espero que entre todas lo consigamos.
Con el tema vestuario, por poner un ejemplo, vale que no les intentemos poner lazos de organza y merceditas de botón... pero el look camiseta corta y enseñando ombligo con pantalón de talle bajo luciendo interioridades para comer en casa de los abuelos el domingo sobrepasa el límite. ¿Qué pensarían ellas si alguna de nosotras se presentara en la puerta del cole vestida de Lagarterana? Pues se morirían de vergüenza porque estaríamos totalmente fuera de lugar. La cuestión radica en que comprendan que con ellas pasa lo mismo. Se puede vestir de más mayor sin necesidad de parecer una pordiosera ni una mini mujer fatal . Difícil, sí, imposible, yo creo (sinceramente lo espero) que no.
Pero como he dicho, esto es sólo un aspecto del cambio. Ya no les gustan los libros que antes les encantaban ni las series que hace dos días no se perdían. Ir al cine con ellas se convierte en Misión imposible y del apartado "Nuevas Tecnologías" es mejor ni hablar...de momento. Ni del tema chicos! Por eso creo que tendremos que seguir un orden para no liarnos. Unos días vestuario, otros entretenimiento, otros relación madres/hijas y , no nos olvidemos, padres y hermanos... que también sufren con el proceso.
Por lo pronto mañana, con el fin de semana encima, podemos empezar con las lecturas. Yo tengo un libro sobre la mesa del que prometo hablaros. Espero que os guste, y a las Cenicientas también. A la mía le ha encantado...y es muy especial cuando de lectura se trata.
Ni que decir tiene que admito todo tipo de aportaciones: literarias, musicales, cinematográficas y, como no, de moda. La idea es que este blog lo hacemos todas:madres e hijas, así que ánimo, que si yo puedo, vosotras también!
1 comentario:
Hola Fátima me paree muy bien el planteamiento y la organización, por aquí sigo dispuesta a participar y aportar algo y recibir mucho. Un besazo. Salas
Publicar un comentario